Ya esta todo preparado para el primer reto del año, después de correr en diferentes pruebas durante estos meses, nos dirigimos a Chile para participar en el Cruce de los Andes. Durante tres días vamos a recorrer una distancia de unos 100km en tres etapas entre la frontera de Chile y Argentina.


A través del facebook o de la pagina de la organizacion, habrá un seguimiento de la carrera, en la cual mi compañero Vicente y yo vamos a mirar de vivir esta experiencia y aventura con la máxima ilusión.




Va a ser un largo viaje lleno de anécdotas para contar en la próxima entrada de este Blog.



                                             
                                                         www.elcrucecolumbia.com

MARATON Y MEDIO = 63km




De vuelta a esta carrera en la zona del Baix Empordà, el año pasado fue en distancia  Maratón (42km), este año en una formato mas duro como fue la Maratón y media, 63km con un desnivel acumulado de 6000 metros en un circuito rompe piernas de constantes subidas y bajadas técnicas que me obligo a exprimir todas mis fuerzas para llegar a meta dentro del tiempo de corte, la verdad que los últimos 20 km se me hicieron duros a un nivel de sufrimiento como hacia tiempo que no pasaba. Valoración positiva de esta prueba en el que el trabajo mental fue más importante que el físico.









 


RUNEANDO POR COLLSEROLA




Siguiendo en la línea de entrenos de cara al Cruce de lo Andes, el pasado 2 de diciembre decidí participar en la media maratón de montaña de Collserola, un recorrido con vistas espectaculares de la ciudad de Barcelona con un desnivel positivo de 785 metros dentro de sus 21 km de distintos caminos intentando mantener un buen ritmo en toda la carrera, al final buenas sensaciones y otro entreno de calidad para ir sumando kilómetros y disfrutar como no de la montaña en un soleado día de domingo.


HASTA LA ULTIMA PLANTA



El pasado mes de noviembre dispute la  Carrera Vertical en el Hotel Hesperia Tower, una divertida y dura prueba, la cual requiere un esfuerzo muy explosivo para poder subir las 30 plantas del edificio en el menor tiempo posible, al final necesite 4 minutos exactos hasta llegar a la linea de meta en lo alto del edificio, una experiencia divertida y original para completar una semana de buenos entrenos.

DE VUELTA POR EL BLOG

Después de varios meses sin pasar por el Blog, voy  actualizar un poco las pruebas disputadas hasta hoy.
Para empezar comentar que las 24 horas de la Breña quedaron en 12 horas debido a una sobrecarga muscular que me obligo a retirarme por precaución, al final recorrimos un total de 64 km. Una lastima no completar esta durisima prueba, pero con la clara intención de volver otro año a terminar hasta el final.

24 HORAS XTREME

A finales de este mes de septiembre vamos a estar entrenando, compitiendo y descansando en la provincia de Cadiz. En casa de mi compañero Vicente, en la bonita población de Chiclana de la frontera, muy cerca de la playa de la Barrosa, la cual sera durante seis días nuestro punto de alojamiento.




Desde allí nos dirigiremos el sábado 29 a Barbate, exactamente al Parque natural del acantilado de la Breña. Donde vamos a participar en la "24 horas solidarias Xtreme" una prueba de Ultra resistencia sobre un recorrido de unos 25km, en el cual vamos a tener que correr durante las 24 horas, en régimen de autosuficiencia alimentaria, así que vamos a tener que sacar lo mejor de nosotros mismos y luchar para sumar cuantas mas vueltas mejor, entre estos bonitos paisajes de la costa gaditana.




SESIONES DE MONTAÑA

Dos meses de entrenos por montañas, julio y agosto son meses con muchas horas de luz, así que combinar trabajo y largas jornadas de entreno ha sido una tarea bastante mas fácil de lo habitual.
En bicicleta pero sobre todo a pie y corriendo, he subido y bajado montañas por la Vall d'Aran, el Pirineo aragonés, la Serra del Cadí, el Parc de San Llorenç de Munt i las muchas visitas a mi montaña
vecina, Montserrat.



                                                         Alto de la Collerada a 2883 metros








Corriendo por encima de 1000 metros y otras veces de 2000 y acercándonos a 3000, han servido también para oxigenar y endurecer los circuitos para unas duras y sufridas sesiones de entreno. Al final disfrutar de la naturaleza en estado puro.